El retorno de la Luz, o el Salto Final

En Sri Aurobindo podemos ver este retorno de la Luz, el esfuerzo hercúleo divino hacia el último salto, la promesa y el trabajo para la consumación final y no sólo un avistaje lejano. Es este traspaso definitivo de la humanidad como raza más allá de la línea de la Ignorancia mientras en el cuerpo es el gran último acto de los descensos divinos. Claro que hay pasos y etapas de las que podemos ya ver las primeras manifestaciones. Hay una presión creciente y un despertar en medio de la humanidad, al menos en un grupo significativo, para recrear nuestro mundo no solamente por medios físicos y científicos, sino por medios psicológicos, internos y espirituales. Hay una ruptura de los límites de la ignorancia en cada esfera que conduce desde una comprensión separativa del yo y el universo hacia una comprensión holística, unificada e integral.

Claro que hay mucho más por venir y no significa tampoco que toda la humanidad de pronto se encontrará más allá de la última frontera. Eso no es posible debido a las muchas capas evolutivas y también por la existencia de diferentes grados de desarrollo entre los seres humanos, dependiendo del tiempo pasado en la Tierra y la experiencia acumulada a través del ciclo de renacimientos.

Tal vez es una masa crítica que se está preparando, un punto de inflexión, por decirlo así, en que al menos un número suficiente de personas estarán listas para la transición final.

Significa que estos individuos que tienen una consciencia interna suficientemente transformada podrán encontrar la forma y los medios para crear un nuevo cuerpo terrenal no sujeto al deterioro, un cuerpo divino, y al morir, simplemente entrar al Nuevo Cuerpo. No volverían, entonces, a la Tierra a través del proceso de nacimiento que crea muchas dificultades, desde la herencia genética hasta la extrema dependencia en los medios físicos. Sino que permanecerían en contacto activo con la atmósfera terrestre para modelar su juego y guiar sus fuerzas hacia lo que siempre fue el objetivo de la Voluntad Divina cuando se sumergió en la danza de la Creación. Alineando sus pasos con el ritmo del Divino Bailarín que ha tejido los pasos de la creación con Sus movimientos, aumentarían la presión sobre la tierra para alinearse cada vez más con las armonías de la Divinidad.

Pero ¿cómo sería su cuerpo? ¿será un cuerpo sutil en contacto con la Tierra o un cuerpo divino que es suficientemente material para ser percibido por otros, quienes todavía trabajan en esta oscura vestimenta mortal?

Podemos volver a esta pregunta más tarde, pero por el momento, mientras entramos en este nuevo año, será bueno recordar que esta Luz que damos por sentada, esta Luz que llega a nosotros barriendo los portales de la Noche, y toca nuestros cuerpos, y nuestro corazón, mente y alma, ha sido preparada por aquello que mantuvieron una vigilia mientras dormíamos tranquilamente en nuestras zonas de confort. Al darle la bienvenida, elevemos también un himno de gratitud, ya que...

"Ahora la deuda está pagada, borrada la cuenta original."

Dr. Alok Pandey